Viajar a Costa Rica

Atravesada por una cordillera de montañas de origen volcánico, en Costa Rica han desarrollado un turismo basado en la admiración y el respeto a la belleza de los recursos naturales, patente entre los costarricenses que demuestran tener una gran cultura, un basto conocimiento de su país y de sus bienes forestales y zoológicos.

Guanacaste
Por daros una pista de lo que allí podéis encontrar, os hablaré de Guanacaste, una provincia al norte del país, donde el clima, muy caliente y seco nos presenta unos árboles de copas anchas y una costa accidentada en cuyas cálidas aguas comparten baño el cormorán y los patos salvajes. Allí está el Parque Nacional del Rincón de la Vieja, un cráter activo rodeado de nueve focos volcánicos, donde podemos encontrar especies vegetales como el laurel, el árbol del indio desnudo, el copey o la guaria morada. Tiene una intensa actividad fumarólica, gran cantidad de vasijas naturales de barro hirviendo y aguas termales sulfurosas, de propiedades curativas. Os recomiendo comer en un sencillo establecimiento que da paso al Parque, ofrecen comida casera y ambiente familiar.
Reserva de Monteverde
Siguiendo hacia el Sur, deteneros en la reserva de Monteverde, donde la tupida vegetación permite oír la lluvia y no mojarse, hay que dedicarle al menos un día. Por la noche, no dejéis de ir al pueblo de Monteverde, allí hay un bar donde encontrareis amigos, buena música y buen guaro. Como hotel, os recomiendo "El Establo", regentado por el amable y seductor Arnoldo. Por la mañana, madrugad y daros un paseo por las copas de los árboles.

Envolviendo a la capital, maravillas como el volcán Poás, el volcán Irazú y la Cordillera de Talamanca, donde os deseo la suerte necesaria para ver el ondulante vuelo del quetzal, ave mágica en peligro de extinción. Poner rumbo al Este, parando a mirar las lenguas de lava que lanza el expresivo volcán Arenal mientras os tomáis un Coco loco en las termas naturales que hay a sus pies.

Parque Nacional de Tortuguero
Llegamos al Parque nacional de Tortuguero, creado para la protección de las tortugas gigantes que van a desovar en sus playas. A ellas es difícil verlas, pero si te adentras por los cientos de Km. de canales y ríos podrás ver monos perezosos (lindísimos), caimanes, gran diversidad de aves y al simpático basilisco, por no hablar de la vegetación selvática o una ranita roja y venenosa.

Parque Nacional de Cahuita
Siguiendo hacia el Sur del Caribe encontramos Limón, Puerto Viejo, el Parque nacional Cahuita, donde la influencia jamaicana se percibe en el ambiente musical, la estética afrocaribeña y los deportes acuáticos acompañados de peces y corales de una belleza cromática exultante. En esta zona el marisco es bueno y a buen precio (¡por favor, rechazad los huevos y la sopa de tortuga!) .Si sois aficionados a cantar o a tocar algún instrumento y llegáis a Puerto Viejo en miércoles, buscad un bar donde os dejarán expresar vuestro arte.

No puedo olvidar las playas de Manuel Antonio, la reserva de Carara, el Parque Nacional de Corcovado. Allí aprendí a caminar por el centro de los caminos, silenciosa, atenta a cualquier ruido, aprendí a "ver", y así pude conocer a los monos cariblancos, las hormigas-bala, la lapa roja, los tucanes, la oropéndola, el quetzal, los monos congo, el colibrí e, incluso, a la ranita de cristal.

Pistas básicas

La entrada a los parques cuesta aproximadamente 7 euros, más o menos lo mismo que cuesta comer en establecimientos sencillos, buenos y limpísimos.
Para comer, probad el gallopinto y el casado, platos combinados de arroz, frijoles, verduras y carne o pescado, muy buenos y equilibrados. La fruta es exquisita y de una gran variedad.
La red de carreteras es muy completa, aunque están en bastante mal estado, informaros para escoger la ruta más cómoda.
La moneda es el colon. Ponen problemas para cambiar billetes en mal estado, aunque sólo sean pintadas. Cambiar el dinero en los bancos.
Costa Rica tiene estabilidad política y social, por lo que no es un país peligroso, aunque siempre se ha de tener precaución, sobre todo en la capital.
El equipaje: ropa fina de algodón, botas de montaña, calzado de repuesto, chubasquero, mochilas impermeables, alguna prenda de abrigo, traje de baño, gorros, gafas de sol, sandalias resistentes al agua, prismáticos, linterna, mucho y fuerte repelente de mosquitos, protección solar.
En todos los pueblos hay servicio de lavandería, muy económico.
No hay vacuna obligatoria ni imprescindible, sólo observad las normas preventivas habituales en vuestro propio país. Costa Rica destaca por su higiene en todos los ámbitos.
Lo más importante, madrugar, ir provistos de agua, comida y ganas de caminar. No tengáis prisa, y pensar que el ver más o menos especies depende de vuestro silencio y de la suerte.